miércoles, 10 de octubre de 2018

La primera vez


Verte crecer es de las cosas más maravillosas en mi vida, me resulta increíble que cada día aprendes a mover y controlar tu cuerpo. Sostener tu cabeza, sucedió en una semana, seguir objetos y reconocer tu nombre también, voltearte fue en un segundo, acompañado de un buen susto y de correr hacia tí, con un miedo y habilidad, que nunca tuve, para evitar que te cayeras. 

En estos últimos días, ya cercano a que cumplas 6 meses, tu crecimiento es impresionante, todos los días logras hacer algo nuevo, agradezco a la vida tener la oportunidad de ser testigo de cómo descubres el mundo, soy la primera en presenciar todos tus cambios y sé, que son cosas que jamás se repetirán, por lo que me considero privilegiada, de poder estar contigo mientras exploras el mundo. Cada día estás más fuerte y segura al sentarte, haces nuevos movimientos, gestos y sonidos, no puedo más que contemplarte y sorprenderme de todo lo que vas logrando.

Tus primeros dientes, salieron de un día para otro, sin llantos, calentura, o diarrea como todo el mundo me dijo podría pasar, haces mi vida tan sencilla, que cuando me siento agobiada, solo basta con verte y recordar lo fácil que fluyes en la vida y me enseñas a mí a fluir de la misma manera. 

Hace unos días fuiste a tu primera clase de natación, pensé que el agua te haría llorar un poco, y nada de eso pasó, eras feliz en los brazos de papá, te veías segura y confiada de que estarías bien, como si supieras que tu padre jamás te soltará y estando con él no corres peligro, porque siempre te protegerá, eras feliz pataleando y salpicando agua, que nunca te escuchamos llorar.

Nuevamente, nos diste una lección de lo simple que es la vida para tí, creo firmemente que desde ahora, nos muestras cómo enfrentarás la vida más adelante, a tu tiempo, sin aspavientos y disfrutando cada cosa a la vez. 

Espero, mí pequeño tesoro, sigas viendo la vida de la misma manera, sin miedos, que los cambios los aceptes como son, parte del crecimiento, qué te dejes fluir con la misma naturalidad que ahora lo haces, viviendo el momento y feliz, espero tener la inteligencia para dejarte ser tú misma y jamás cortar tus alas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario